Serendipia by Sibyla Sibela

DISCLAIMER

♦Bleach y sus personajes pertenecen al troll de Kubo Tite-sensei.

♦El siguiente fic contiene lenguaje algo fuerte (por el contexto de los personajes) y escenas explícitas (no en este capítulo, creo >o^ ) nahhh olviden esto

♦Primer fic que escribo para este fandom, dedicado a Natalia-senpai ♥ por lo menos es válido mi intento, espero no quede en intento.

¡A leer!
Serendipia
A Bleach Fanfic By Sibyla Sibela
♥Dedicado especialmente a Natalia-senpai♥

Capítulo 1
Renji: “No debí haber escuchado eso”

Una serendipia es un descubrimiento o hallazgo fortuito que se produce cuando se está buscando otra cosa distinta. Generalmente es afortunado... Generalmente.




El seireitei abrigado por la fría noche, ese invierno venía siendo inusualmente frío. Construcciones de estilo Edo(*) lucen erguidas e imponentes en la reconstruida base militar del Gotei 13. Hace ya un buen tiempo que la guerra había terminado, nuevos aires corrían por la reformada Sociedad de Almas. Como testimonio para las futuras generaciones permanecen impasibles los monumentos en honor a los caídos en batalla, traen a la memoria el recuerdo de Yamamoto Genryuusai que es solo uno de los que destacan entre los ilustres héroes del más sangriento combate librado en la milenaria historia de ese mundo, almas que cayeron defendiendo su honor, esa parte del legado que no se debe olvidar y quedará grabado en los anales de este inquebrantable sistema, los shinigami sobrevivientes (muchos de ellos jóvenes soldados recién egresados de la academia) eran el núcleo impulsor y a la vez los guardianes protectores de esta herencia. Justamente algunos de ellos se encuentran en sus labores de vigilancia cotidiana...

–¿¡PERO QUE MIERDA HACEN BASTARDOS...!? –interrumpe un mando notablemente ofuscado, se trata de un oficial superior del escuadrón diez, el recién ascendido Yamamura Daigo quien posee una gran musculatura que infunde el temor en los nuevos reclutas pero lo que más destaca es su colorido verbo.


–¡Señor, sí señor! –Gritan al unísono los jóvenes, reaccionando entre asustados y perezosos...


–¿¡No se supone que soldados de su rango deben permanecer en sus puestos de vigilancia...!? ¡Pero no... ¡Los encuentro en menesteres ineceptables! ¡REPRESENTAMOS AL GLORIOSO ESCUADRÓN DIEZ POR UN DEMONIO... SON UNA VERGÜENZA... ¿QUÉ DIRÍA EL CAPITAN HITSUGAYA Y LA HERMOSA TENIENTE MATSUMOTO!


–Pero Señor... –interrumpió uno de los reclutas –si justamente fue la teniente Matsumoto quien nos relevó de nuestro puesto...


–¡RESPETA A TUS SUPERIORES NIÑO, OSAS CONTRADECIRME Y MANCHAR EL HONOR DE NUESTRA TENIENTE! ¡NO ME ENGAÑAN, HAN DEJADO SUS PUESTOS Y POR LIBAR LICOR EN PLENA HORA DE TRABAJO, ESTO AMERITA UNA ACCIÓN DISCIPLINARIA!


–Señor es cierto lo que decimos –se atrevió a participar el otro recluta pero este se notaba visiblemente borracho y desaliñado –la teniente fue quien nos dio permiso de...


–¡QUÉ LAS CELEBRACIONES DEL ONOMÁSTICO DEL INSIGNE CAPITÁN HIRAKO-SAMA SE HAYAN DILATADO NO LES DA DERECHO A DESCUIDAR SUS MISIONES Y MENOS PONER EN DUDA LA RESPONSABILIDAD DE NUESTRA TENIENTE! –Escupió terriblemente indignado, el shinigami.

–Como si no la conociera... –refunfuñó

–¡NO REPLIQUEN PEQUEÑAS SABANDIJAS! ¡REGRESEN AL ESCUADRÓN AHORA MISMO, MAÑANA RECIBIRÁN SU AMONESTACIÓN, INÚTILES!

Se alejó arrastrando a los jóvenes reclutas, ese par la tendría muy complicada.

Este era solo un caso, la situación que rayaba lo decadente se debía nada más y nada menos a los festejos del cumpleaños del Capitán Hirako Shinji... Una celebración muy convenientemente organizada e impulsada por la cúpula de la Asociación de Mujeres Shinigami... Un Festival de Invierno, bebidas calientes, espectáculos, todo un cronograma de eventos no solo para homenajear a el estimado capitán, en realidad era una excusa para confraternizar y disfrutar de los recientes tiempos de paz. Aunque como mencionaron, las celebraciones de extendieron más de lo normalmente permitido y todo acabó en descontrol.

Las calles lucían desastrosas y como mudos testigos de las celebraciones... Botellas y soldados tirados cual campo de batalla, pero no eran bajas del combate sino ebrios víctimas de la sobre-ingesta de sake. Los shinigami no están excentos de vivir su vida de dioses y es que estas divinidades también podían disfrutar de los placeres que cualquier indigno mortal se diera la libertad de experimentar, por lo menos en fechas especiales como esta. La celebraciones ya se habían extendido bastante incluso para las más entusiastas y promotoras de este actual bacanal empero bien valía la pena después del largo proceso de reconstrucción de la morada de los dioses de la muerte, su centro de operaciones y toda la Sociedad de Almas... El trabajo fue arduo pero ¿Por qué no disfrutar ahora de este merecido tiempo de paz? ¿No era lo mejor después de tamaño enfrentamiento final en la guerra contra el Wandenreich? La respuesta era obvia pero incluso en estos momentos un par de menos grandes resultarían un problema... ¡Y qué problema! Beodos, sucios, desperdigados por las calles y en pésimas condiciones soldados y nuevos reclutas...  Tenientes e incluso capitanes trataban de alargar las celebraciones... Pero ante todo despreocupados, contentos, plenos... Esta era una merecida catarsis.

A lo lejos se distinguían las siluetas de dos féminas en medio de una amena conversación ajenas a los gritos de los pobres reclutas que ya se iban extinguiendo.


–Rangiku-san no te parece que esta vez sí nos pasamos... creo que debemos... –decía una algo asustada Hinamori, cuando fue interrumpida por la iracunda y voluptuosa mujer.


–Jajajaja Momo-chan por favor no seas aburrida, si tú eras de las más entusiastas hip... ahora no vengas con arrepentimientos hip... ¡Venga abrázame que comienza a hacer frio hip! –soltó la alcoholizada teniente mientras trataba de abrazar a la pequeña castaña.


–Rangiku-san si Toshiro-kun te ve así te meterás en problemas...


–Nahhhh mi capitán estará muy ocupado para regañarme jijiji, disfrutemos lo que queda y mañana sufrimos con la resaca y los gritos del capi hip ¡La noche es joven, a la cantina se ha dicho hip! –con gesto entusiasta Matsumoto agarró de la muñeca a la pequeña y se dispuso a dar brincos en dirección a el bar más cercano, definitivamente la impulsora debía ser la última en querer terminar con el jolgorio.
Gracioso espectáculo se estaba formando con Matsumoto vociferando y tratando de despertar a los reclutas tirados en el suelo cuando un inquietante ruido proveniente de los matorrales distrajo a las shinigami.


–¡Hinamori-chaaaaaaan! –sonaba algo lúgubre la voz de...
–¡CAPITÁN HIRAKO! –gritaron al unísono, más que por interrumpir era por el estado del rubio, ya que parecía un zombie...


–Capitán ¿era aquí dónde estaba? Gracias a Dios que lo encuentro ehhh o lo que queda de usted...–decía Hinamori bastante preocupada aunque aliviada...


–¡He visto cosas horribles Hinamori-chan! –se acercó Hirako y reaccionó al instante –¡¿Qué... Qué es eso de lo queda?! Hay mucho de mi listo para más acción recuerda que todo esto es por mi y wahhhhhh... –el capitán fue traicionado por su estómago, ya que terminó vomitando...


–Hirako-san usted desapareció por horas ¿¡Tan divertidos estaban los arbustos hip!? No perdió el tiempo jejeje –Se burlaba Matsumoto


–Capitááááááán, por favor será mejor volver al cuartel además su cumpleaños terminó hace dos días –la castaña lo ayudó a pararse no sin antes sobresaltarse por la situación.


–La noche es joven ¿verdad Rangiku-chan? ¿Qué más da... días más días menos, aprovechemos el momento, ne?–sonriente Hirako se dirigió a la blonda teniente...


–Pues sí, capitán, pero preferiría celebrar con hombres que puedan mantenerse en pie, sin ofender hip... –Matsumoto le respondió juguetona


–Ah... Primero Ichigo y ahora tú Rangiku-chan... Así tratan ustedes al celebrado...–se lamentó el hombre con aspecto bastante deprimente
–¿Kurosaki-san se retiró temprano verdad? –recordó con un gesto pensativo, la teniente Hinamori.

Y es que Kurosaki Ichigo ya era parte oficial del Gotei 13, había decidido permanecer voluntariamente en la Sociedad de Almas... Aunque en estas celebraciones no se notó su entusiasmo, estaba algo apático últimamente, por lo menos es lo que sentía la castaña teniente.

–Ese aburrido de Ichigo, no sabe lo que se perdió... Yo muy gentil le presentaría a las lindas subordinadas del escuadrón...wahhhhh –Hirako volvió a vomitar


La teniente del rubio se lamentó por tal escena pero ya estaba algo acostumbrada al especial carácter de su superior pero como dijo, él era el celabrado, por lo menos lo era hace dos días. Se dispuso a llevarlo casi arrastras mientras Matsumoto sonreía satisfecha, estos tiempos de paz deben ser aprovechados al máximo se decía mentalmente mientras animaba a los reclutas que sí podían mantenerse en pie a continuar con la fiesta en la cantina más cercana. Capitán y teniente se despidieron rumbo a su respectivo escuadrón, Hirako debía recuperarse de la sobredosis festiva nada que un buen descanso no pudiera solucionar. Matsumoto los despedía agitando su mano con gesto divertido, dió media vuelta y acompañó a los "sobrevivientes" a la entrada de la cantina.


Se dispusieron a pedir sake caliente para combatir esa fría noche, muchos soldados yacían inconscientes disfrutando de los placeres oníricos, esa escena era tan elocuente que la rubia no pudo evitar echarse a reir y más cuando reconoció a alguien que reaccionaba y se incorporaba lentamente...


–Ara.. ¡Renji-kun! ¡Qué sorpresa, parece que te divertiste mucho hip! –se puso rápidamente frente a el pelirrojo teniente, cruzando los brazos e inclinándose para burlarse...


–¿Cuánto tiempo pasó? Ehhh –reaccionó el hombre, apenas volteando la cabeza a todos lados, buscando a alguién.
Matsumoto seguía disfrutando esto y ahora el alto teniente era objeto de su atención, lucía bastante demacrado y muy sonrojado producto del alcohol, apenas podía mantenerse en pie...


–Veo que Ichigo-kun no te acompañaba... ¿A qué lo estas buscando a él, ne? –le preguntó muy curiosa...
Después de la gran guerra Kurosaki Ichigo y Abarai Renji estaban más unidos que nunca, bueno ahora que el pelinaranjo compartía hospedaje con el teniente del sexto escuadrón, ciertamente eran muy cercanos pero...


–Nahhhh ese cobarde se fue hace... Ehhh... Bueno se terminó escapando, resultó ser un niñito que... no aguanta más de dos botellas de sake... Hip –el pelirrojo terminó sujetandose la cabeza, en verdad estaba muy mareado...


–Jejeje Renji-kun al final el que resultó más inteligente fue Ichigo-kun hip... Seguro se fue a disfrutar por ahí con mejor compañía que la tuya jejeje ya que tu eres él que no aguanta ni dos botellas de sake hip... Mira como estás jajaja... –de nuevo con tono picaresco y total descaro, señalándole con un dedo, así le refutó Matsumoto.

Y es que a Renji, esa coqueta mujer, le estaba buscando... ¿Pelea? El teniente del sexto escuadrón, un hombre forjado desde su niñez en uno de los distritos más peligrosos,  un hombre que fue capaz de darle cara a Kuchiki Byakuya, a el mismo Aizen... Esa rubia mujer ¿estaba acaso retándolo a... ?


–Ne, Renji-kun... ¡¿Una competencia de quien cae primero hip!? –interrumpió sus pensamientos la bien dotada mujer que osó exterder su brazo para recorrer el hombro y capturar así la espalda del pelirrojo teniente, con botella de sake en mano incitándolo a la competencia...


–Anda Renji-kun... Apuesto a que Ichigo-kun puede con esto y más... Además ya sabes en que jueguitos anda jiji –Añadió de forma pícara la mujer.

–¿Ehhhhh? ¿A qué te refieres? –pregunto algo confundido, estaba en un estado alcoholizado pero conciente, tal vez no tanto para captar la indirecta.


–¿Vamos Renji, a qué no lo sabes hip? Pero si Ichigo vive contigo hip no se supone que tú debes ser el primero en enterarse de las andanzas de tu amigo hip –cambio a una mueca bastante incrédula.

–¿Andanzas? ¿De qué demonios hablas? Ragiku-san

–En verdad eres tan lento teniente, nahhhh... Yo como miembro estrella de la Asociación de Mujeres Shinigami tengo información clasificada pero en serio me sorprende tu inocencia hip... ¿A qué Ichigo te ha dejado abandonado en medio de las fiesta de sake, ne?


–No entiendo a que quieres llegar.


–Nahhhh te lo digo todo si me ganas en una competencia de Sake ¿Qué dices, eh? –se arrodilló y lo miró, acto seguido le guiñó un ojo coqueta –¿El teniente tiene miedo que una mujer le gane en un reto? –completó desafiante.

Renji no escaparía, un reto es un reto, viniendo incluso de una mujer y más si la competencia de sake no era el fuerte de este shinigami... Tenía desventaja pero Matsumoto ya estaba en un estado bastante avanzado de alcoholización, así que... ¡No podía retroceder, su ego masculino estaba en juego y seguro le recriminaría no aceptarlo!


–"¡No le temo a un par de botellas extras de sake!" –pensó para si mismo y comenzó el juego, donde él llevaba la delantera.

Tragos van, tragos vienen, incluso algunos reclutas se fueron aproximando para observar el show que se llavaba a cabo... El teniente iba ganando por cuatro copas de sake a la agraciada shinigami, se podían oir vitores a favor del orgulloso varón que inflaba el pecho por tamana hazaña, sonreía con mueca ávida de triunfo... Matsumoto bajó la cabeza con media copa de sake... ¿Se rendiría?

–Teniente Abarai no se confie... ¡Aún no hemos terminado hip! –todos gritaron emocionados al ver como la sensual teniente del décimo escuadrón embullía sedienta todas las copas restantes de sake, una gran ovación inundo el bohemio recinto y al ver a su segunda al mando ganar la copentencia no hizo más que los reclutas estallaran en júbilo... Definitivamente estos dioses de la muerte sabían como aprovechar estos escasos días de relajamiento.

Ambos tenientes se encontraban totalmente ebrios aunque claro, Matsumoto tenía experiencia y ella era la definición de la frase: "una dama siempre digna hasta el último momento" en definitiva esa mujer había ganado en todo sentido manteniendo su garbo incluso en esa cantina.
Renji apenas podía mantenerse de pie y despierto, el hombre no solo tenía el orgullo destrozado sino una extraña sensación. Prefirió dejar de pensar... Su cabeza daba vueltas y en cualquier momento vomitaría, debía aceptar su derrota y llevar lo que quedaba de si mismo a su casa antes de seguir exponiendo su lastimero estado y ser la vergüenza del honorable escuadrón seis.
Derrotado, el pelirrojo, optó por abandonar ese lugar de perdición, recuperarse de tamaña humillación y claro descansar para sobreponerse de esa sobredosis de alcohol... La resaca que tendría seguro le dudaría todo lo que quedaba del mes... Tambaleándose y sin ayuda de nadie salió de la cantina tomando el camino principal.


–¡Renji-kun cuando gustes puedo darte la revancha hip! Agitaba un brazo despidiéndose y compartiendo un abrazo fraterno con sus subordinados que estaban dispuestos a seguir con la diversión.

No le dió cara, no estaba de humor y menos en esas condiciones, su cuerpo apenas le respondía y sus sentidos estaban desconsertados por la nueva dosis de alchohol ingerida y es que aunque algo  descansado, ya había estado bebiendo anteriormente acompañado de Ikkaku, Hisagi, Kira y por supuesto Ichigo... Ese shinigami de anaranjados cabellos se le cruzó por los pensamientos. Se había atrevido a dejarlo en plena diversión con todos los compañeros... Y es que se había aclimatado relativamente bien a su "cambio de domicilio", a su nuevo hogar, a la Sociedad de Almas... El lugar por el que casi pierde la vida con tal de proteger, sin duda era tratado como uno más de ellos y es que a sus ojos, ese adolescente inmaduro había cambiado mucho aunque claro en escencia seguía siendo el mismo mocoso temerario y buscapleitos de siempre. Sí, quien lo diría, el Kurosaki terminó como héroe de guerra y, una vez más, con una deuda que la Sociedad de Almas le tenía a cuenta... Aunque el ritmo de vida era abismalmente distinto al del mundo humano, Renji estaba convencido que Ichigo pronto terminaría por disfrutar esta nueva etapa como shinigami, después de todo era la elección propia que había tomado, su camino y el destino que él mismo eligió... Pero ese comentario de Rangiku lo descolocó... ¿Fue sólo para incitarlo a la competecia? ¿Incoherencias de borrachos? No le dió crédito pero en su rostro de dibujó una ligera sonrisa... Recordó esos momentos, aún con la memoria afectada por el alcohol, era el ingreso del pelinaranjo al escuadrón trece...

Que afortunado había resultado ese pelopincho, el escuadrón a cargo de su ciudad natal, además Rukia estaría guiándolo... No aguantó la risa al saber que la menuda shinigami era la superior de ese chico. Rukia mandándole todo el día, obligándolo a hacer los trabajos de los nuevos reclutas y más engorrosas tareas... Y es que el muchacho no había pedido un trato preferencial por su condición, solicitó que le pasará el mismo protocolo que con los recién enlistados a uno de los escuadrones del Gotei 13... Ese tipo era todo un caso, todo un espécimen. Con esos pensamientos vió que había llegado a la pequeña estancia que compartía con Ichigo, una pequeña casa tradicional japonesa, después de todo fue la propia idea de Renji acogerlo en su hogar por lo menos para la primera etapa de reconstrucción del Seireitei, ya después buscaría algo más cómodo para su amigo, no le disgustaba compartirlo con él pero sabía que Ichigo tendría más y más misiones mientras ascendía posiciones en su escuadrón y pues no le molestaba ser él precisamente quien lo instruyera en la dinámica de las misiones y como funcionaba este sistema, se lo debía ante todo como amigo y shinigami.

Reparó en que se encontraba a duras penas en el portal de la construcción tradicional pero al parecer las llaves no se encontraban en el bolsillo de su uniforme... Y la estancia lucía a oscuras apenas iluminada por una farola de la calle.

–¡Mierda, Ichigo no regresó... tendré que entrar por detras! –maldijo su suerte y estado, apenas podía mantenerse en pie, utilizó sus manos y fue tanteando la pared, rodeando el muro más próximo en busca de una ventana, la encontró pero se estaba cerrada y cubierta... –¡Otra vez... mierda! –fue avanzando pero sus piernas lo traicionaron y cayó de bruces contra los arbustos que rodeaban la pared, a gatas fue tratando de avanzar, en que estado tan lastimero se encontraba el teniente, así sería la burla de quien lo viera... Se detuvo y decidió rendirse, su cuerpo ya no aguantaba, que miserable se sentía, juraba que no volvería a participar de ninguna de esas fiestas locas maquinadas por la Asociación de Mujeres Shinigami, ellas eran las culpables, se repetía para convencerce... Poco a poco el sueño fue haciendo su aparición y el fiero shinigami fue víctima de los efectos del sake... Los arbustos lo acogieron en esa noche fría y solitaria.


* * *


–Ahhhh~

"¿Dónde estoy?"

–¡Ahhhhh... Sí! mmmmm...

"¿Qué es eso?"

–Mmmmmm ¡Sigue! ¡Ahhhh...así más fuerte...!

"¿Ehhhh?"

–¡Ahhhhh! !Ohhhhh! ¡Sigue, sigue por favor, más rápido!

" ¿Pero qué demo...?”

–mmmmmm…¡Síííííííííííí...!

Renji se incorporó lentamente con un eco que embriagaba sus oídos... Un sonido distorsionado, lejano que se colaba por sus sentidos... Era una voz... Una voz femenina... Una sensual voz femenina que lo incitaba a... a...

Sacudió la cabeza escapando del hechizo en que estaba... Recobró el conocimiento se vio tendido en maleza rodeado de arbustos, tardó en reaccionar pero aún sentía mareos, no podía levantarse...

–Ahhhhhhh~

Ese sonido volvió pero está vez era ¿real?

–mmmmmmmmmm

Ahí estaban de nuevo, eran... Acaso eran... Lo eran, eran los suspiros de placer más exitantes que podía haber oído... Pero ¿De dónde provenían...? Obviamente provenían de una mujer pero ¿Desde donde...?
Volteó su cuerpo y levantó la cabeza, vio una ventana cubierta... Era su casa...

–Ichigoooooooooo mmmmmm~

Era lo que pensaba, una actividad nada inocente, ¿Ichigo quéééééé? Se cruzó por su mente...

"Mierda ese cabrón de Ichigo, se atrevía a... a... No puede ser... "eso" está sucediendo en mi casa..."


–¡Ichigo no pares ahhhhh, ahhhhhh~!

"¡¿PODRÍA SER POSIBLE TANTO DESCARO?!...¡EL CABRÓN DE ICHIGO ESTA TENIENDO SEXO EN MI CASA... EN LA CASA DE ABARAI RENJI!"
–lo maldijo mil veces mentalmente y casi se atrevió a gritar pero se contuvo... Acaso por querer continuar oyendo tremendo espectáculo aunque apenas perceptibles, esos suspiros inundaban su mente y claro él no se consideraba la clase de pervertidos que disfrutaban oir las intimidades ajenas pero... Era adictivo... Por supuesto dejó de pensar eso cuando los gruñidos de Ichigo se hicieron más fuertes y casi opacaban a los de la chica... Era más que obvio que el dichoso hombre era Ichigo, Kurosaki Ichigo pero su apasionada acompañante... ¡¿Quién era?! No podía jactarse de conocer íntimamente a todas las mujeres del Sereitei pero esa fémina cuya voz de deshacía en suspiros y gemidos de los más eróticos... No era nada familiar, para nada.

Persiguiéndose mentalmente notó que después de un gran gruñido las voces se iban extinguiendo... –"¡Mierda Ichigo! ¿Serás...? ¡Carajo!"–Se reprimió y se limitó a gritar mentalmente pegó la oreja más a la pared pero fue en vano, ya no se escuchaba nada... Y no es que necesitará escuchar más pero la curiosidad por la identidad de aquella mujer lo carcomía, era eso, pura curiosidad... O el efecto del alcohol o en definitiva era un pervertido de mierda... Pero prefería echarle la culpa a el alcohol.

–Ichigo de mierda... –susurró por lo bajo mientras arrastras se acomodaba entre los arbustos... El sueño lo vencía otra vez pero ahora no sabía si podría quitarse de la cabeza esos gemidos tan jodidamente sensuales que inundaban su mente y lo arrullaban mientras caía otra vez en las garras del sueño.


* * *


–¡Oe... Renji... Renji... Mierda despierta Renji!

Con tremendo grito en su oído, el teniente pelirrojo abrió los ojos de par en par, se incorporó solo logrando sentarse... Le dolía la cabeza y sus tímpanos reventaban... No hizo más que sujetarse la cabeza pero se rindió y volvió a refregarse en el matorral en que se encontraba...


–¿Ahora las plantas resultan más cómodas que un futón(**) y las sábanas incluso un tatami(***)? ¡Oe, cabeza de piña...! –Gritó nuevamente el hombre y no se trataba de nadie más que de Kurosaki Ichigo...


–¡Carajo, no ves que la cabeza me revienta so pedazo de animaaaaal! –tratándose de despavilar, Renji refutó entre adolorido y enojado...

La luz solar le dio directo a los ojos, ese día era inusualmente luminoso y terminó gritando por el shock.

–Te dejo un momento y mira en que condiciones te encuentro, señor teniente –Ichigo continuó con el tono burlón.

De pronto como un flash, a Renji le vinieron a la mente las celebraciones por el onomástico del capitán Hirako, la fiesta, el desenfreno del alcohol, los amigos, la post-celebración, la borrachera, Rangiku, la competencia, las putas llaves desaparecidas... Los arbustos... ¡Los gemidos eróticos y llenos de placer... Ichigo y esa mujer en su casa... Mierda!¿Un sueño? No, eso no fue un sueño... Sucedió en verdad en su propia casa... Debia preguntar.


–Oe Renji...–Ichigo se arrodilló y se dirigió a él con una mirada burlona –Los de tu escuadrón te buscaban hace un momento, les dije que no has aparecido por aquí... No te preocupes con suerte te dan por muerto y te dejan descansar hasta nuevo aviso jajaja –soltó irónico el pelinaranja.


–"¡Hijo de pu...!" –gruñía mentalmente el adolorido teniente que se limitó a fulminar con la mirada al shinigami de cabellos chillones... El descarado sonreía de oreja a oreja... tenía un aspecto pulcro y bien uniformado se notaba a leguas que había tomado un baño y se encontraba listo para las labores.

–Desapareciste en lo mejor de la fiesta ¿Qué día es?–fue lo único que atinó a decir.

–Sabes que no se me da eso del alcohol... Además "la fiesta" ya había terminado hace mucho –ironizó haciendo comillas con los dedos –Y descuida que sólo es el día siguiente a lo del bar... Supongo que has dormido un par de horas.



–Yo supongo que huiste de nuestra reunión en el bar, con eso queda comprobado que le temías a todas esas botellas de sake.


–¿No te queda claro que no se me da eso del alcohol? ¿En qué idioma quieres que te lo repita, idiota?

–Ya, pero... ehhh... Supongo que hay otras maneras de pasarla bien en una fiesta –añadió Renji queriendo sacar un tema especial a conversación

–"¿En verdad quiero preguntar sobre eso?"– terminó por recriminarse esos pensamientos... pero consideraba nakama a Ichigo, un gran amigo y se suponía que pueden confiar mutuamente... ¿Sería correcto sacar eso a conversación o era precipitado? ¡¿Pero si el cabrón fue el que se había tirado a una mujer en su propia casa?! Algo le decía al pelirrojo que tenía derecho a preguntar y era ahora mismo.


–¿Ah? –hizo un ademán de desconcierto –¿A qué viene eso? –preguntó extrañado Ichigo por el tono que uso su compañero.

–Nada, olvidalo tsk... –rechistó mientras trataba inútilmente levantarse, Ichigo lo ayudó con una sonrisa burlona...

–Ves lo que ocasiona beber hasta vomitar... Pero supongo que... –interrumpió sus palabras, el pelinaranjo, sacando algo de sus bolsillos –jejeje no encontraste tus llaves y... No te preocupes yo pagaré el repuesto de las que perdí... Te las devuelvo.

–Ichigo grrrr... –gruñó entendiendo que esa era la causa por la que se encontraba en esa situación, desaliñado, sucio y con hojas por todo el cuerpo...


–Nahhhh un poco de aire fresco no le hace daño a nadie... –añadió para ponerle paños frios al momento.

Ichigo se disponía ayudar a su amigo, lo levantaría y llevaría a la casa para que se recuperase, ya luego arreglaría las cosas con su escuadrón. No pudo evitar notar el gesto incomodo de su compañero, algo le molestaba a ese pelirrojo de mirada fiera... El tiempo ha cambiado a Kurosaki Ichigo, era maduro y capaz de darse cuenta del  humor fluctuante de nakamas como Renji... Era eso o su amigo se había hecho demasiado obvio...

–Si quieres preguntar algo ¡HAZLO DE UNA PUTA VEZ! –se lo dijo sin rodeos muy al estilo desenfadado de Ichigo.

–¿En serio quieres que te pregunte? Ejem... ejem... –Renji se sonrrojó y fingió una tos algo sobreactuada.

–¿Sabes? Creo que ya te encuentras mejor, me voy al cuartel, buena suer... –Ichigo fue inmediatamente interrumpido por Renji quien lo sujetaba del hombro haciendo una presión que incómodo al varón que se disponía a retirarse.

–Yo creo que merezco una explicación... O bueno no exactamente una "explicación" si no más bien ejem... no lo malinterpretes yo... –se empezaba a sentir fastidiado.

–El alcohol definitivamente no es lo tuyo, miráte se te ha subido totalmente al cerebro grandísimo p... –fue cortado abruptamente.

–Bien, lo diré solo una vez... Ichigo... De algún modo hasta entoces desconocido no encontré mis llaves y no pude entrar a la casa... Tuve que buscar otra entrada y... Cof cof... No pude evitar escuchar algo extraño justo debajo de esta ventana, que resulta ser tu habitación y pues...

–... –Ichigo miró serio a su compañero estaba dispuesto a cortar esa tonta conversación y...

–¡¿TE HAS TIRADO A UNA MUJER EN MI CASA GRANDÍSIMO HIJO DE P...?! –Gritó rojo de ira.

–¿Ahhhhhh? –La expresión de Ichigo cambió de un momento a otro... Y lo que transmitía no tenía precio, entre anonadado y avergonzado por la franqueza de su amigo, solo abrió la boca enormemente... Espero unos segundos y atinó a decir –¡¿Era eso?! –con mueca incrédula aunque el carmín se asomaba en sus mejillas.

–... –Un silencio incómodo los rodeo.

–Tsk... primero pierdo misteriosamente mis llaves, luego me veo forzado a dormir en la intemperie y luego... Luego... ¿Qué? ¿QUEÉÉÉ? Te parece poco cabrón... Te encierras en MI casa... Te tiras a una mujer en MI casa ¡¿ESO TE PARECE POCO IMBÉCIL?! –Con gesto amenazador rompió el silencio, realmente estaba iracundo alzando la manos y todo eso.

–¿Ehhh?–soltó Ichigo algo incómodo pero con postura ya relajada parecía no terminar de entender la situación.

–¡Grrrrr Ichigo! –enzeñandole el puño derecho en forma amenazante, como podía ser que se hiciera el desentendido de esa forma.

El pelinaranja guardo silencio otra vez, respiró profundo, miró a los ojos directamente a el pelirrojo y se dispuso a hablar.

–¡Y YO TENGO QUE PEDIRTE PERMISO PARA TODO CABEZA DE PIÑAAAAAAAAA! –cambió de momento su actitud y se puso a la defensiva –¡¿ESTÁS BUSCANDO PELEA TAN TEMPRANO?! –Renji se aturdio con esta declaración, entedió que en efecto eso era lo que buscaba y por el tono que el Kurosaki imponía estaba dispuesto a seguirle el juego.

–"Un momento –pensó Renji –No se ha negado... El muy idiota no lo ha negado" –se contuvo un momento y luego gritó a todo pulmón –¡MIERDA, YO NO SOY EL QUE EMPEZÓ ESTO Y LO SABES! ¿SUPONGO QUE AHORA YO SOY EL PROBLEMÁTICO, NO? –Renji no podía evitar replicar, esto ya estaba saliéndose de control.

–¡¿ES ESO LO QUÉ REALMENTE TE JODE?! –Ichigo no se quedaba atras.

Este par parecía dos perros rabiosos riñendo y enseñando sus dientes mientras juntaban sus frentes, buscando dominar la situación.

–Demonios eres tan infantil Ichigo, Yo... Yo... ¡NO SOY TU NIÑERO, IDIOTA… PERO POR LO MENOS COMPRENDERÍA SI QUERÍAS PRIVACIDAD! ¡EN VERDAD ME INTERESA UNA MIERDA LO QUE HAGAS EN LA INTIMIDAD...! –bajó el tono de su voz precipitadamente y continuó –Pero... quería que tuvieras confianza conmigo... ¡¿Somos amigos o no?! –añadió Renji bastante abochornado pero calmado y aliviado, lo había soltado todo.

–Ahhhh~ –Ichigo suspiró y miró a su derecha sin ningún punto en especial, se tocó la cabeza en el proceso – Supongo que tienes un buen punto... Lo siento pero en algo complicado... –decía mientras rascaba su cabeza era claro que evadía  la mirada del pelirrojo.

–Ya... fue un desliz de una noche, ¿no? –dijo Renji convencido de esto internamente, aunque no pudo evitar preguntar, ya que entre los temas de conversación nunca habían sacado a féminas no de manera sería... No, definitivamente Kurosaki no tenía alguna relación formal... ¿O sí?

–Creo que fuí claro al decirte que no tengo porque pedirte permiso para...

–No tienes que pedir permiso –interrumpió Renji– Yo ya te dije, sólo tenías que decir que necesitabas privacidad y pues... pues... ¡Somos varones y te comprendo, tenemos necesidades no necesitas explicar eso, idiota...!

–¿Estabas espiando verdad? –Ichigo dijo esto con un gesto fulminante que dejó frio de ¿Miedo? a su amigo.

–¡¿Ahhhhhh?!– fue lo que respondió Renji y casi cae al escuchar tremenda acotación, muy dentro de él sabía que no estaba fuera de lugar y la verdad lo dejaría como un completo pervertido –¡PUES TÚ TIENES LA CULPA ANIMAL, MIRA QUE...!

–Ya déjalo... –Ichigo había intuido que no sabía quien era su acompañante de esa noche, o el teniente no estaría tan alterado como ahora... Se notaba que era presa de la curiosidad –Te dije que es complicado...

–¿Es una de las nuevas reclutas de tu escuadrón...? –se paró al recibir otra fulminante mirada del pelinaranja con ceño fruncido – Ya... lo dejo campeón... me ahorro los comentarios pero si quieres consejos tú puedes...

–¡Renji de mierda! –gruño cuando escuchó ese tonito de voz que usaba su compañero quien se apoyaba en su hombro para entrar a la casa.

Sí, era surreal imaginar a Ichigo en esas situaciones pero para Renji era algo normal, el pelopincho ahora es uno de ellos después de todo y "eso" también era un aspecto de la vida de un shinigami. Comprendía si su amigo se guardaba algunas cosas, después de todo él mismo no le contaba sus enredos tampoco. Reparó en que fue demasiado fácil decircelo y bastante directo pero la situación se torno chistosa... Ambos eran un par de niños peleando de esas manera... Se miraron cómplices mientras el teniente era llevado a la entrada de la estancia.

–"¿Es eso lo que realmente me jodió, qué no me dijerá que estaría ocupado con una mujer, qué utilizará mi casa a escondidas o...? Debo dejar de pensar así... Es el alcohol ¡Es ese maldito sake!" –reprimió esas preguntas y cierta idea que flotaba en su aturdida mente –"Debo sentirme contento después de todo ¿no?"

Con esos pensamientos y una sonrisa de orgullo entró a la casa para tener un merecido descanso. Ya después se encargaría de sacarle algo de información a ese chico.



* * *


La fiesta había concluido oficialmente y con un saldo bastante alto, los shinigami iban poco a poco volviendo a su rutina diaria, claro después de una jornada de limpieza y disciplina liderada por el mismísimo capitán Zaraki, todos los escuadrones tuvieron una tarea asignada entre limpieza general, ordenamiento de tropas, hasta servicio de reciclaje e incluso enfermería a cargo del escuadrón cuatro. Tremenda fiesta se armaron estos dioses de la muerte pero era tiempo de volver a su realidad. Hasta Matsumoto tuvo que lidiar con la furia de su pequeño capitán, estaría recluida todo un mes en el cuartel de su escuadrón ordenando todo el papeleo atrasado de meses y adicionalmente pagaría las consecuencias de relevar a todos los miembros subordinados de sus respectivos puestos... Esa fiesta si que traía estragos.


Tres días después del bacanal, Mansión Kuchiki

El mayordomo de la familia anunciaba al teniente del sexto escuadrón, Abarai Renji como visita... Rukia lo esperaba en su habitación...

–Vaya si que te divertiste, Renji –lo miró graciosa y con tono relajado –¿Tanto te ha durado la resaca? Faltaste hoy a la reunión de tenientes, tú nunca haces eso...

La teniente del escuadrón trece se encontraba sobre un zafu (****) de seda, junto a una pequeña mesita donde colocaba su taza de té, galletas y una fina tetera de porcelana junto a incienso perfumado que aromatizaba toda la habitación, vestía un kimono lila sencillo pero se notaba que era un regalo muy caro de parte de Byakuya, estaba relajada concentrada en disfrutar su bebida caliente.

–¿Ni un buenas tardes merezco tsk?... No me vengas con eso Rukia, ¿tú también te sumas a la avalancha? –Soltó Renji exhausto.

–¿Avalancha? Por favor Renji, te lo tienes merecido por idiota... Todos comentan tu derrota en la dichosa competencia de beber sake... Mira que retar a la teniente Matsumoto, agradece que saliste vivo y de pie... Ahora eres el centro de las habladurias... Hasta tienen fotos exclusivas que se publicaran en el Semanario de la Asocia...

–¡Ya basta Rukia, por favor, esto es demasiado! ¿Acaso hasta el Rukongai está enterado?–la interrumpió visiblemente abochornado.

–Pues tú te lo buscaste Renji tonto... ¿Ahora te esconderás en mi casa por tamaña verguenza? –le dijo con mirada maliciosa pero sin perder lo burlona –Nii-sama se enterará tarde o temprano, aunque claro él no hace caso a chismes ni habladurias pero teniendo en cuenta que defraudaste a tu escuadrón... Él toma muy en serio eso y pues...

–Basta Rukia, se trata de que me tranquilizes, no que alimentes mi ansiedad... –Le respondió tapando el rostro con una mano a modo de lamento.

–Jajaja pero si es de lo que todo el mundo habla en la base: "teniente derrotado se arrastra por el suelo pidiendo clemencia"... Quien lo diría, Abarai Renji en una competencia de esas y cayéndose de borracho, por favor...

–Ya déjalo Rukia... Por lo menos me divertí y me dí el lujo de tener esa borrachera que solo te da una vez en mil años de vida, te aseguro que con esta basta y sobra... No podría decir lo mismo de ti... ¿O acaso tú...? Nahhh tu eres la noble señorita que no sabe divertirse... –Le puso especial énfasis a lo de noble.

–¿A qué viene eso...? Yo me sé divertir, a mi modo, y termino en mejores condiciones que tú, b-a-k-a-m-o-n-o...

–Pues no te ví en todo el día, bueno ese dichoso día...

–Renji... Eres un completo imbécil... –Le dirigió su mirada ojivioleta de tal manera que lo dejó frío, esa mirada era capaz de penetrar el alma del más valiente guerrero –¿Qué tratas de decir? Yo no tengo tus costumbres... Estoy demasiado ocupada como para celebrar dos días después de lo que se supone era una ceremonia en honor a un capitán y que finalizó en un festival improvisado... Eso no es lo mío y eso de la bebida... Renji, lo sabes y actualmente tengo demasiado papeleo, nuevos reclutas que aceptar, gestionar la recuperación de archivos valiosos destruidos durante la invasión... A diferencia de cierta persona.

–Ahhhhh~ de nuevo no Rukia –Renji se notó a si mismo siendo reprendido por una especie de superior... Combinada extrañamente con el estilo de su capitán.

–Deberías aprender algo de mí, ya llevas tanto tiempo así, no te cuidaré toda la vida... –Añadió Rukia.

–Rukia, lo que me consuela es que estoy seguro que  a Ichigo le das todos los días esta clase de sermones y peor...supongo...

–¿Acaso ese tonto te ha comentado algo?–preguntó curiosa sorbiendo té de la taza que cogía entre sus manos.

–¿Eh? Cambiaría algo si acaso te digo que se queja todo el tiempo de tí –Renji lo dijo en tono lúdico.

La conversación se vio interrumpida al momento que Rukia escupió su bebida...

–¡¿ESE IMBÉCIL ESTÁ LOCO O QUÉ?! ¡APENAS Y LOGRAMOS CONVERSAR, YO TENGO MI TRABAJO, ÉL SUS MISIONES... CREES QUE POR QUE ESTAMOS EN EL MISMO ESCUADRÓN ESTOY DETRÁS SUYO TODO EL DÍA, NO DOY SU NIÑERA!

–Esta bien Rukia, era solo una broma, cualquiera pensaría que estas alterada...

–Ahhhh~ –se tranquilizó –Puedo asumir por tu "grato" sentido del humor que ni siquiera puedes hablar con él verdaderamente, porqué seguro ni le alcanza el tiempo para conversar ¿no? –La pequeña shinigami se notaba más tranquila, aunque bastante sarcástica.

–Nahhhhh ese tipo cada vez está más ocupado "asumes" bien pues a pesar de que compartimos casa, de aquí a un tiempo no lo veo tan seguido, apenas y en la noche... Ese hombre llega tan cansado que ni siquiera come... Tu escuadrón sí que está aprovechándolo al máximo... –Renji quería jugar al mismo nivel de Rukia.

–Ejemmmm –Interrumpió con una tos encubierta... –Ni siquiera sé como terminamos hablando de Ichigo pero... ¡No juzquez los procedimientos de mi escuadrón! Sabemos perfectamente todo lo que puede dar Ichigo y le exijimos lo justo y necesario... Es parte del proceso, sabes que no sería fácil, nuestra vida no es fácil Renji... –dijo esto último con un dejo de... ¿Impotencia?

–Rukia, yo... lo sé, es solo que pocas veces tenemos la oportunidad de celebrar de esta manera, hubieras visto a los reclutas... Realmente estaban relajados... Era algo merecido... Y  de repente Ichigo y tú desaparecen y pues... No puedo evitar pensar...

–¿Pensar qué? –Miró de reojo a su amigo, curiosa.

–Pues que... que... –titubeaba el pelirrojo.

–¿Qué...? –La pelinegra arqueó una ceja, se mantenía espectante a lo que diría Renji.

–Que definitivamente ustedes dos... No saben como divertirse.

–¿Ahhhh? –Rukia se mostró totalmente confundida.

–Sí, acéptalo, solo piensas en trabajo, debes aprender a relajarte y pues Ichigo, a ese no sé que bicho le picó...

–Ay Renji... –Ahora ella se tocó la cabeza como haciendo un gesto de ¿Realmente esto me está pasando a mí? Y suspiró...

Ese chico siempre le sacaba una sonrisa, mientras conversaba con él, no pudo evitar mirar al gran jardín de la mansión de Byakuya... Se encontraba exactamente al frente de su habitación, su hermano había mandado a decorarlo especialmente para ella... Perdió la noción de lo que hablaba Renji... No pudo evitar perderse en sus pensamientos... ¿Cuántas cosas habían cambiado desde que se recobró la paz? Ella misma había cambiado mucho... ¿Cuántas cosas más estarían por cambiar? Suspiró por la incertidumbre del mañana.

Continuará?
_____________________

(*)Edo.- Referente al período de la historia feudal del Japón.
(**)Futón.- Cama tradicional japonesa.
(***) Tatami.- Protector del suelo tradicional en los ambientes de casas japonesas.
(****) Zafu.- Un cojín redondo usado en Japón y China.




Nota de la autora:
Has llegado al final del capítulo, gracias... Esta idea surgió por una conversación con un amigo también lector de Bleach... Conversamos sobre un personaje en común que nos encanta: ¡Renji! Él me dijo que Renji le parecía un perv jajaja era broma, creo... Y pues aquí está mi fic inspirado también en un askblog de Tumblr... Una serie de preguntas indiscretas a Ichi y Rukia... Jajaja una me divirtió mucho y mi imaginación voló... Dudas, tomatazos, cartas de odio, en la cajita de comentarios ↓↓↓ o  a mi LJ http://sibylasibela.livejournal.com No es necesario tener cuenta, comenta como "anonymously" (anónimo) en el primer post de bienvenida, no te tomará ni un minuto ¡Es gratis!

BLEACH ©Tite Kubo

6 comentarios:

  1. Está genial; todavía no haz aclarado quién es la amante de Ichigo, pero tengo la sospecha de que es Rukia *!!!*. Me pregunto como será la actitud de Renji al saberlo xD.
    Espero cuanto antes el próximo capitulo! =3=.

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    1. Ashhhdhgoguggagagu :3 gracias que intrigosa soy jejeje si he sebrado la duda creo que en balance valió la pena escribirlo, de nuevo gracias por la buena onda, saluditos y felices fiestas

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  2. Ay Renji Renji Renji jajaja me deja con el misterio de quien sera esa chica. Puede que sea Rukia, pero eso es nuy obvio por lo que por eso espero que no sea y que asi nos soprendas jajaja

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    1. 1er objetivo:sembrar el misterio. CUMPLIDO.
      2do objetivo:dejar la intriga hasta la próxima semana. ?
      3er objetivo: dominar el mundo. EN PROCESO
      :3
      ¡FELICES FIESTAS Y FELICIDAD!

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  3. Jojojo de nuevo soy una intrigosa, muchas gracias a ver como continúa esto , mi objetivo era hacer algo gracioso sin llegar a la comedia romántica, necesito relax ^^ y Sip Renji es todo un caso me encanta, se supone que será el hilo conductor del fic idk, si te dejé con el misterio cumplí con mi objetivo eso me hace muy feliz viniendo de otra escritora T_T arigatou♥

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  4. Ese Renji es súper loco Jajajaja lo que va ha descubrir como no tomara? Se pensara convertir en un espía para descubrir a la "chica secreta" de ichigo ?. Y Rukia también oculta algo que será?.

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